"No hay mayor incongruencia que la de estar sometido a una devoción. Yo soy cautivo confeso del "Mira qué fue de Aureliano Mercader". Una devoción absurda a la vez que seductora. O compleja al tiempo que sugestiva. Y es que, cuando uno habla mucho consigo mismo, acaba por creer que su voz es la de otros".
https://www--iea--es.insuit.net/catalogo-de-publicaciones/-/publicador/la-noche-antes-de-irse978-84-8127-279-6/ua0a9hdPwFkF
No hay comentarios:
Publicar un comentario